Discutiríamos por todo, pero más que nada porque sospecharías que te estoy metiendo los cuernos o también porque vos estarías tomando de más, porque habría llegado tarde, o porque tendrías el celular apagado, y porque nuestras respectivas juntas son demasiado buenas o demasiado malas.
Me iría a dormir al estudio con una colcha, la notebook y un vaso de leche y vos me destrozarías algunas remeras lindas. Pero después nos extrañaríamos, me irías a buscar, y todo volvería a la normalidad.
Sin embargo, me engañarías varias veces, y yo tendría pruebas concretas (sólo tres o cuatro veces) y te perdonaría siempre. A los diez años de convivencia te metería los cuernos yo también, para que le duela en el ego. Te enterarías, resolverías las cosas a piñas, y nos volveríamos a arreglar.
Y así hasta que la muerte, mi psicoanalista o una chica más linda nos separe...
rosca power
2 comentarios:
Gabi! Cuánto tiempo! Me alegra mucho leerte de nuevo y veo que tus posts son tan intensos como siempre, tan cargados de imágenes y de sentimientos como nunca.
Te eché de menos, amigo mío. Un abrazo grande.
Hola de nuevo hermano del alma.
Me tomo unas vacaciones en mi blog. Dejé de sentirme con derecho a escribir. Ojalá en el futuro retomemos nuestros sueños.
Un abrazo enorme
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